¿Samsung Galaxy S7 Edge o iPhone 7 Plus? Esa es la pregunta más repetida ahora que Samsung y Apple han desplegado su artillería pesada para este 2016, convirtiendo a estos dos dispositivos en la punta de lanza de sus compañías.
A continuación veremos los pros y contras de ambos terminales en un verdadero duelo de titanes.
Simplemente con ver las hojas de características de cada terminal puedes comprobar que ambos terminales, aun siendo el tope de gama de cada casa, han seguido líneas muy diferenciadas. Samsung ha seguido una línea continuista a nivel estético y ha fijado sus esfuerzos en lograr un terminal que lo resista todo: golpes, agua y polvo, a niveles nunca antes vistos. Apple por su parte ha invertido en algunos cambios estéticos, aunque su mayor empuje se ha concentrado en conseguir una cámara fotográfica que haga las delicias de los amantes a la fotografía.
En cuanto a resistencia, no cabe duda de que el Samsung está por encima del iPhone. No sólo es que el S7 Edge pueda ser sumergible en agua a 1,5 metros de profundidad, como confirma su certificado IP68, si no que el S7 Edge está diseñado para resistir impactos de caídas a más de 1,5 metros de altura gracias al Corning Gorilla Glass 4. El iPhone 7 Plus, por su parte, en el apartado de resistencia está un paso por detrás, ya que sólo cuenta con el certificado IP67, lo que indica que es resistente a salpicaduras pero en ningún caso sumergible.
En las pantallas, ambos terminales usan tecnologías claramente diferenciadas y antagónicas. Mientras que el S7 Edge utiliza una pantalla super AMOLED, la del iPhone 7 Plus es IPS LCD. La pantalla IPS del iPhone 7 Plus gana a la super AMOLED del S7 Edge, sobre todo, en la calidad de la imagen. La pantalla IPS tiene mejor reproducción del color, mayor nitidez, mejor ángulo de visión y un color blanco más intenso. Por su parte, la pantalla super AMOLED tiene como beneficio que requiere una demanda energética menor, porque no utiliza retroiluminación, haciendo que el terminal sea más autónomo. El asunto energético no es algo baladí, ya que el S7 Edge tiene una batería de mucha más duración que el iPhone y si a esto se suman las características de las pantallas de cada dispositivo, comprobamos que el S7 Edge es un terminal mucho más autónomo que el iPhone 7 Plus.
Si hablamos de memoria, la memoria RAM del iPhone 7 Plus es de 3 Gb, mientras que la del S7 Edge es de 4 Gb. Donde gana el iPhone es en la memoria interna, pudiéndose adquirir terminales hasta con 256 Gb, mientras que el S7 Edge tiene 32 Gb que se puede ampliar hasta 200 Gb más con una tarjeta SD.
La conclusión a esta comparativa es que ambos terminales son excelentes dentro de los objetivos que han buscado sus respectivas compañías y que depende de tus necesidades como usuario la elección de uno u otro.
Si necesitas más información sobre el Samsung S7 Edge y el iPhone 7 Plus, puedes ver los post que hemos realizado de ellos por separado:
Descubre el nuevo Samsung Galaxy S7 Edge.
iPhone 7 Plus. La nueva evolución de Apple ya está aquí.
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