En pleno siglo XXI la evolución de la tecnología es progresiva e imparable. Entre todo este desarrollo se encuentra Android que, en pleno apogeo, se cuela en cada vez más ámbitos. ¿Qué nos puede ofrecer en el sector educativo?
Así ya hemos hablado por aquí de el uso de nuevas tecnologías en el sector educativo o incluso de la creación de dispositivos pensados especialmente para ello. Pero la versatilidad de Android hace que podamos personalizar nuestro smartphone o tablet con aplicaciones y contenidos, convirtiendo nuestro dispositivo en el mejor compañero tanto para el estudio como para la enseñanza. Por ejemplo:
Tenemos multitud de apps para gestionar archivos en la nube. Así los alumnos podrán guardar los trabajos, los profesores los documentos del aula y ponerlos a disposición del alumnado... Además, con la creación de carpetas compartidas se facilita la interacción entre alumnos y profesor.
Edición de documentos online: esto solucionará muchos problemas de trabajos grupales.
Calendarios y agendas. ¡Se acabó el no saber la fecha de un examen! Si en las clases se establece un calendario compartido, no habrá más excusas del tipo 'no sabía que era para hoy'
Pizarra virtual. Hay varias apps que permiten ver en tu dispositivo lo que se escribe en otro simultáneamente. Además, también puedes hacer que se vea en un proyector, por lo que facilita la manera de dar clases y compartir el conocimiento. Y también se acabaron los mensajitos en aviones de papel entre compañeros 😉
¡Y muchas cosas más!
¿Y por qué Android y no iOS o Windows Phone? Sencillamente porque, hoy en día, Android supera a Windows Phone en número de dispositivos e iOS es demasiado exclusivo... ¡No todo el mundo tiene un iPhone! Los terminales Android están más diversificados.
Así, el uso de este tipo de tecnologías en las aulas nos traería grandes ventajas: interactividad, la implementación de contenidos multimedia, un acceso más rápido a la información... ¿Estamos viendo el futuro?
