Un comunicado de Samsung ha descartado la posibilidad de actualización que parecían tener los usuarios del smartphone Galaxy S y el tablet Galaxy Tab a la versión 4.0 de Android Ice Cream Sandwich.
El pasado 20 de diciembre la compañía surcoreana anunció una actualización para muchos de sus dispositivos. Este proceso se llevaría a cabo a principios del 2012 pero quedaron excluidos de la lista los dos citados anteriormente.
Los motivos eran la capacidad de la memoria RAM y ROM y una serie de incompatibilidades para la nueva versión Android que hacían que Ice Cream Sandwich no se ejecutara al 100 por cien.
Como era de esperar las críticas por parte de los usuarios hicieron mucho ruido y una semana después de lanzar la noticia, Samsung incorporó a la lista al Galaxy S y al Galaxy Tab. La compañía comprobaría la posibilidad de actualización de estos dispositivos a Android 4.0.
Finalmente, declaraciones por parte de Samsung a The Next Web confirman la negativa de actualizar estos dos dispositivos a Ice Cream Sandwich.
Según declaraciones del portavoz de Samsung las especificaciones del Galaxy S y el Galaxy Tab son limitadas y totalmente optimizadas para la experiencia de Gingerbread.
Parece que los usuarios de estos dispositivos no van a tener finalmente suerte y se quedarán sin actualización.
