Grandes inventos que se quedaron en... nada

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Es probable, sólo probable que si cierras las persianas, apagas la luz y te sientas en silencio en el sofá de tu casa no cometas ningún error durante los próximos minutos, pero aun así, no hay nadie que te lo pueda asegurar. Y es que la única forma de no equivocarse es no hacer absolutamente nada, que se lo digan a los presidentes de las comunidades de vecinos.

Errare humanum est…

Veremos a continuación como las grandes compañías tecnológicas que han cambiado para siempre nuestra forma de vida gracias a sus exitosos inventos, también se han equivocado y vaya si lo han hecho, pasen y vean…

Remontémonos al año 1976 cuando Sony puso el cine en nuestros salones gracias al innovador vídeo Beta, que ofrecía una mejor calidad de imagen en unas cintas de tamaño reducido, pero su negativa a abrir su estándar, tal y como hizo JVC con el VHS, y al elevado precio de sus vídeo reproductores hicieron que este formato pasase pronto al olvido, algo parecido les ocurrió posteriormente con el minidisc, el laserdisc y el formato de películas UMD.

Pero si alguien no se ha podido equivocar nunca, esa es desde luego Apple, la empresa más rica del planeta es un ejemplo de éxito.  Pues me temo que no, la lista de productos de Apple que iban a revolucionar el mercado y que acabaron en el baúl de los recuerdos es también muy larga.

Los fracasos del Apple III y Lisa entre otras cosas, acabaron con la primera etapa de Steve Jobs en la empresa que había creado. Pero, si existe un producto de Apple verdaderamente revolucionario que fracasó, ese fue sin duda el Apple Newton. Creado en 1993, el Newton fue el precursor de las PDA’s y posteriormente del iPad y el iPhone.

El MessagePad, ese era su verdadero nombre, era un producto adelantado a su tiempo, que tomó el apodo de Newton por el nombre del sistema operativo que lo controlaba, se trataba de una libreta digital con una pantalla táctil y un puntero stylus, y que era capaz de reconocer el texto manuscrito. En 1998 se retiró del mercado.

Pero Jobs tenía claro que cuando innovas se comenten errores, que rápidamente hay que olvidar para seguir adelante. Y así lo hicieron, en 1996 salió al mercado la “popular consola Pippin” ¿te suena? ¿No, verdad? Y es lógico, ya que únicamente se vendieron 42000 unidades, su rival en aquel momento fue la Nintendo 64.

…sed perseverare diabolicum  

Sigamos con una empresa que en aquel momento, año 2003 dominaba el mercado de la telefonía móvil y también decidió competir con Nintendo adentrándose en el mundo de los vídeojuegos con la consola portátil Nokia N-Gage.

La N-Gage combinaba un teléfono móvil con una consola portátil, una idea sin duda genial, dentro de un artículo realmente bello y de gran calidad, que sin embargo fracasó fundamentalmente por la falta de títulos destacados y su nula ergonomía.

Y ya que hablamos de Nokia ¿Por qué no hablamos de Microsoft y su decisión de comprar al gigante finlandés para lanzar al mercado terminales móviles con el sistema operativo Windows Phone? casi mejor que no… Pero Microsoft también ha tenido su dosis de humildad, gracias, sobre todo a los sistemas operativos Windows Me y Windows Vista que pasaron con más pena que gloria.

Pero aquí hay sitio para todos, la gran G también sabe lo que es intentar revolucionar el mercado y quedarse en eso, en un intento. Si hay algo que no se le da nada bien a Google son las redes sociales. En enero de 2004, unos días antes de que Facebook viera la luz, los de Mountain View crearon Orkut, su primera red social, que fue muy popular en Brasil, India y Pakistán, pero no así en el resto del planeta. En 2009 y 2010 lo volvieron a intenta con Google Wave y Google Buzz, con idéntico resultado. La fusión de las redes sociales de Orkut y Buzz dieron lugar a Google + en 2011.

Pero si hubo un producto de Google llamado a cambiar nuestras vidas, esas fueron sin duda las “archifamosas Google Glass”, estas gafas estaban destinadas a marcar un antes y un después en la forma que mirábamos el mundo, pero los problemas de privacidad, una batería escasa, su elevado precio y la incomodidad hicieron que pasasen a un segundo plano.

No quedan ahí los grandes inventos llamados a revolucionar la existencia humana que acabaron en el trastero acumulando polvo, podríamos seguir enumerándolos. Todavía te acuerdas de tu increíble televisor 3D, ¡lo sabemos!. De hecho han resultado ser tan numerosos que recientemente se ha creado en Suecia el museo del error que aglutina a todos los Frankenstein de la tecnología digital. Por cierto, el museo cerró sus puertas el 15 de septiembre. Sí, has acertado, también ha sido un fracaso, sus poco más de 7000 visitantes no le han permitido generar los ingresos necesarios para continuar con su trayectoria.

¡Ah por cierto! la expresión latina completa es:

                                               “Errare humanum est, sed perseverare diabolicum”

que traducida literalmente significa:

                                       "Errar es humano, pero perseverar (en el error) es diabólico”

Así que tampoco conviene excederse.