Cinco cosas que debes saber si Hannibal Lecter te invita a cenar

Miriam Lagoa Vidal
BlogCollaborator

Los 'remakes' se están haciendo fuertes la ficción televisiva. Historias que recuperan series del pasado,  películas adaptadas al relato por capítulos o versiones estadounidenses de éxitos de otros países. En las últimas temporadas se han incorporado también series que recrean o viajan hasta los orígenes de historias muy conocidas por el público. Ahí están 'Bates Motel', centrada en la juventud de Norman Bates o 'Hannibal', aunque su caso es todavía un poco más especial. 

 

El drama estadounidense, cuya primera temporada está disponible en Movistar TV y la segunda se estrena el 3 de abril en AXN, aporta un enfoque nuevo a la historia que había ideado Thomas Harris en sus novelas y que ya había sido llevado al cine en varias películas como 'El Dragón Rojo' (2002), su fuente principal de inspiración',  'El silencio de los corderos' (1991) o 'Hannibal' (2001). El protagonista es Will Graham, un asesor del FBI con una capacidad asombrosa para meterse en la piel y en los pensamientos de los asesinos que termina por afectarle a él psicológicamente. Aquí es cuando entra en escena el doctor Hannibal Lecter, que ayuda al FBI en los perfiles psicológico de los criminales y empieza a desarrollar una relación obsesiva con Will.

 

 

 Además de la historia, uno de los puntos fuerte de la serie es una estética muy cuidada y una atmósfera incómoda puestas al servicio de Hannibal, un personaje sofisticado, malvado y seductor al mismo tiempo. Ninguno de los guiños que tiene la serie, hacia el espectador y hacia la historia que le ha servido de inspiración,  son casuales y detrás de las cámaras hay algunos más que explican por qué 'Hannibal' es una serie tan empeñada en jugar con los sentidos del público.

 

Los títulos de los capítulos. Los de la primera temporada hacían referencia a platos o términos de la cocina francesa ('Amuse-Bouche', 'Coquilles', 'Rôti'...) y los de la segunda son platos japoneses ('Kaiseki', 'Sakizuki', Hassun). En su mayoría son manjares en los que la carne es uno de sus ingredientes principales. Como dijo el Doctor Lecter en uno de los capítulos de la primera temporada, sus cenas no son aptas para vegetarianos.

 

El cuidado diseño de los platos. El asesor culinario de la serie es el chef español José Andrés, que ha detallado algunas de su elecciones a través de su cuenta de Twitter. La encargada de planificar la escenografía de los banquetes es la artista canadiense Janice Poon, quien a través de su blog explica como emplata los manjares que se sirven en cada capítulo. Mejor no pensar en los ingredientes.

 

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La reinvención de Hannibal. El actor danés Mads Mikkelsen ha consguido superar uno de los grandes retos que tenía que la serie: hacer que la audiencia se olvidara de Anthony Hopkins poniendo cara y gestos al famoso caníbal. Con su porte elegante, maneras educadas y su doble cara el nuevo Hannibal Lecter ha sabido jugar con la información previa que tiene el espectador para reiventar al personaje.

 

 

Una serie muy viva en las redes sociales. Quien quiera conocer más detalles sobre la producción puede acudir a la cuenta de Twitter de Bryan Fuller, creador de la serie, aunque con la advertencia de que tuitea en directo los capítulos que se emiten en EE UU y no avisa de los spoilers. Es muy interesante también la web del canal AXN, responsable de la emisión de 'Hannibal' en España, que estas semanas está analizando los capítulos de la primera temporada, bajo el título de #DescuartizandoHannibal, para preparar el regreso de la serie el 3 de abril.

 

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Un plan para siete temporadas. Si la audiencia y los productores le apoyan, Bryan Fuller tiene previsto hacer siete temporadas y llevar a la historia más allá de 'El silencio de los corderos', que centraría la trama de la quinta y  la sexta temporada. Hannibal pasó algunos apuros para conseguir la renovación tras su primera temporada pero cuenta con el apoyo de la crítica y unos seguidores, autodenominados #Fannibals, que dan rienda suelta a su imaginación a través de redes sociales como Twitter o Tumblr.