Buenos días a todos los lectores de este hilo. Por mi parte, creo agotadas las posibilidades de que movistar trate de manera decente a sus clientes. Por eso, he pedido la baja en la compañía. Sé que algún lector, aunque no de los participantes en el hilo, pero sí habitual palmero de movistar, que se disfraza de "ayuda" al cleinte con problemas, se alegrará de ello, ya que, en alguna ocasión, me había "animado" a marcharme. Ahora, le he hecho caso. No por nada de las estu-pideces que me han dicho sino porque, finalmente, me han demostrado que movistar vale lo mismo que ellos: nada. La última, ha sido un cobro indebido sobre un servicio no solicitado. Por mucho que, de palabra, me han dicho los operadores que tengo razón, que es "un error", lo cierto es que, reclamado el asunto en varias ocasiones, movistar insiste en tratar de humillarme con datos absolutamente falsos en la incidencia aludida. Tampoco voy a aburriros con detalles. El caso es como cuando hice una queja por escrito solicitando el HGU, y me contestaron diciendo que "la facturación es correcta". No se miran nada, ni prestan una mínima atención al cliente. Lo que sí quisiera es compartir con vosotros mi decepción con la compañía, que es incapaz de una mínima empatía con el cliente, empeñada en una estéril política de captar nuevos clientes, descuidadando por completo a los de toda la vida. En cualquier cursillo de fin de semana de marketing, se echarían las manos a la cabeza con estas políticas, que son el abc de una mínima coherencia en la fidelización. Sencillamente, creo que la compañía ha perdido el norte. Lo recobrará, pero me temo que demasiado tarde. Naturalmente, me niego a pagar un servicio que no he pedido, ni disfrutado. Como, encima, me llamarán moroso, opto por irme. Naturalmente, a la competencia, donde tienen equipos decentes, y les importan los clientes, puesto que a los antiguos les tratan como a los nuevos. Ayer, en O-range, por ejemplo, me decían que entre sus objetivos -económuicos- priorizaban la fidelización del cliente a la captación del nuevo. Lógico. En fin. Os deseo suerte y espero que, finalmente, la compañía os de lo que pagáis.
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