¿Pagar con cookies o pagar con dinero?
El pasado 11 de enero entró en vigor la última actualización de la AEPD (Agencia Española de Protección de Datos) sobre el uso de cookies para adaptarnos a las nuevas directrices del Comité Europeo de Protección de Datos.
Básicamente, lo que dice es que los usuarios deben tener la opción de "Rechazar cookies" al mismo nivel que "Aceptar cookies", que ambas opciones 'aceptar y rechazar' deben presentarse en un lugar y formato destacable y que rechazar cookies no sea más complicado que aceptarlas. Es decir, se acabó lo de “Configurar Cookies” para ir luego rechazando una por una las que no estamos dispuestos a consentir, especialmente las de publicidad.
Implicaciones del nuevo modelo de cookies
Con el modelo de cookies que teníamos antes de esta actualización el porcentaje de usuarios que accedía a la configuración de un sitio web para ir seleccionando las cookies que aceptaba y rechazaba era más bien pequeño, principalmente porque requería un esfuerzo de tiempo y dedicación. Con el nuevo modelo, en el que el banner de cookies recoge “Rechazar todas”, algunas fuentes de la industria especifican que hasta el 40% de los usuarios podrían rechazar las cookies.
O lo que es lo mismo, un 40% de personas a las que no puedes acceder con publicidad personalizada. Y esta es la razón que ha agitado todo el sector, especialmente, el de los medios de comunicación digitales.
Cómo afecta el nuevo modelo de cookies a los medios de comunicación
Los medios de comunicación viven de la publicidad y ésta se nutre de cookies. Sin ellas, no se puede ofrecer publicidad personalizada y se merma considerablemente sus ingresos.
Los anunciantes piden métodos de verificación de audiencias (determinados perfiles a los que orientan sus productos o servicios) sin esos datos, la publicidad es “a peso”. Y pocos son los que están dispuestos a invertir para impactar a perfiles sin segmentar.
Pago de una suscripción a cambio de no recibir cookies
Se ofrece otra alternativa si no se acepta con cookies, la opción de pagar con dinero, los usuarios pagan una suscripción y no reciben cookies. Es la opción que ya están ofreciendo algunos medios digitales y que está suscitando todo tipo de dudas acerca de la legalidad de la medida.
Alternativa de navegación sin cookies
La guía de cookies de la AEPD lo que dice al respecto es que si el usuario rechaza las cookies, se ha de ofrecer una alternativa de navegación sin cookies “no necesariamente gratuita”. Así que no, ni es ilegal, ni está fuera de la norma.
Por lo que hemos ido viendo hasta el momento, los principales medios y sitios web de información de nuestro país se están decantando por dos modelos:
Modelo de suscripción de pago
Modelo de suscripción de pago para ofrecer una experiencia de navegación sin cookies a los usuarios que entran en su página web y quieran consumir sus contenidos. Es el modelo que tiene, por ejemplo, Ok Diario, que ofrece navegar sin publicidad con un coste o navegar gratis con publicidad.
Otros, como el Diario de Sevilla, ofrece la alternativa de “Rechazar y Pagar”, en este caso mediante proveedores externos al medio.
Content pass
Content pass Es el otro modelo que últimamente estamos viendo. Se trata de un modelo ofrecido por la empresa alemana Contentpass en el que se puede navegar sin cookies por los medios asociados con una tarifa de 3,99€/mes. Es el modelo que tiene, por ejemplo, la cadena SER.
La principal ventaja con respecto a la anterior opción es que no es necesario un desarrollo propio de “muros de cookies” o de suscripción y, por tanto, más fácil de implementar.
Publicidad personalizada: supervivencia del modelo
Todas estas opciones han suscitado un intenso debate en las últimas semanas, pero quizá el error está en pensar que la información que consumíamos hasta ahora en los diferentes medios digitales era gratis. Nunca lo fue. Siempre hemos pagado con nuestros datos y con ellos, los medios digitales han podido ofrecernos publicidad personalizada, la base de su negocio.
Según Contentpass, la mayoría de los editores europeos pierde un 40% de sus potenciales ingresos por publicidad debido al bloqueo de anuncios y, apenas logran que sus lectores, tan sólo un 5% de ellos, paguen por los contenidos que están consumiendo.
Detrás está toda una industria que ve cómo su modelo de negocio está amenazado y que está ofreciendo diferentes opciones para navegar por sus webs, ofreciendo alternativas a navegar sin cookies sin que se resienta su cuenta de resultados.
Iniciativas como contentpass pueden ser una solución si los medios que figuran son del interés del usuario pero presenta dudas cuando sólo interesan dos o tres de los muchos cientos que ofrecen como medios asociados. ¿Para qué voy a pagar por leer medios que nunca visito?
Quizá sea momento de replantearse que la información de calidad no es gratis y que de la misma manera que pagamos suscripciones a plataformas de streaming para ver películas tendremos que pagar, de una manera u otra, por leer noticias y contenido de los medios digitales.