Movistar era plenamente consciente de que al llevar el servicio de atención al cliente fuera de España iba a suponer una merma considerable en la calidad del servicio. Conocen perfectamente cuál es el tipo de formación que dan a sus empleados y qué nivel de profesionalidad es el que pueden alcanzar con ese tipo formación (tenemos infinidad de casos que lo demuestran en este foro). Y también saben, por supuesto, el ahorro en costes que supone llevar este servicio a países donde el sueldo de los empleados es mucho menor que aquí, sin ser aquí, por otro lado, nada del otro mundo.
Resumiendo, que nada de lo que está pasando le pilla por sorpresa a Movistar, todas las consecuencias eran perfectamente previsibles. Así que, desgraciadamente, tengo que ser pesimista en cuanto a una improbable rectificación de Movistar en este asunto. Ojalá me equivoque, pero son decisiones que no se suelen echar para atrás a corto plazo, y menos aún cuando supone un ahorro en costes, aunque quede demostrado que sea a costa de una calidad en el servicio muy deficiente.