En marzo de este año el acuerdo estratégico de colaboración de Nokia con Microsoft y su sistema operativo Windows Phone cumplía un año. De esta colaboración ha surgido la gama Lumia que ha conseguido abrirse un hueco en el mercado de los smartphones frente a los líderes Apple y Android, aunque todavía está lejos de pisarles los talones.
El pasado mes de febrero Nokia afirmaba confiar plenamente en dicho acuerdo pero parece que para cubrirse las espaldas tiene un plan B por si esta colaboración no da los resultado esperados. Son varias las empresas del sector que están viendo su situación empeorar a pasos agigantados y la compañía finlandesa no quiere ser una de ellas.
El presidente de la junta de Nokia, Risto Siilasmaa, ha concedido una entrevista a un canal de televisión finlandés en la que ha decladaro que Nokia cuenta con un plan de contingencia por si este acuerdo fracasa, aunque afirma que tienen "plena confianza" tanto en el CEO de Nokia, Stephen Elop, como en Windows Phone.
La verdad es que la situación es un poco contradictoria. Por un lado tenemos declaraciones como estas sobre los próximos dispositivos equipados con Windows 8: "es una plataforma tecnológica de primer nivel capaz de proporcionar a los usuarios una experiencia de usuario sin fisuras a través de múltiples plataformas, desde PC a 'tablets' y teléfonos inteligentes".
Este tipo de declaraciones nos hace creer en la confianza ciega que la compañía finlandesa ha depositado sobre Microsoft, sus dispositivos y su sistema operativo. Pero cambia la cosa cuando Nokia declara públicamente que tiene una vía de escape, aunque sea por si acaso.
El tener una segunda opción no demuestra mucha confianza en este acuerdo pero teniendo en cuenta la situación del mercado de los smartphones, competitivo como el que más, ninguna empresa está a salvo por muchos años de experiencia que tenga. Nokia es consciente de esto y quiere cubrirse las espaldas.
¿En qué consiste dicho plan? Nokia no ha comentado nada sobre cuáles serían los pasos a seguir según este plan pero en esa misma entrevista Siilasmaa aseguró que dicho plan no está relacionado con Symbian, el SO móvil nativo de Nokia, ya que la "cuota de Symbian en el mercado se ha reducido casi a cero".
Si no es Symbian, ¿qué puede ser? Lo lógico sería pensar que Android pero Nokia ha dejado caer alguna que otra vez su idea de alejarse de la plataforma de Google. A mi personalmente me encantaría ver dispositivos resultado de esta combinación. Los años de experiencia de Nokia hace que tenga unas habilidades de fabricación de hardware de lo mejorcito que podemos encontrar. Si a esto añadimos las funcionalidades de Android el resultado podría ser de lo más interesante.
Y a ti, ¿cuál te gustaría que fuera el próxima paso de Nokia?