La pesadilla de los 902
¿Quiénes se benefician?
«En ningún caso el servicio de atención al cliente proporcionará ingresos adicionales a la empresa prestadora del servicio a costa del cliente», decía el Proyecto de Ley de servicios de atención al cliente que aprobó el último gobierno de Zapatero en junio de 2011, pero que finalmente quedó en el limbo con el adelanto de las elecciones. «En teoría quienes se benefician de los números de tarificación adicional son solo las compañías telefónicas», aseguran desde la asociación de consumidores Facua, «pero hemos detectado anuncios en los que ofertan a las empresas un porcentaje de los 902».
Facua: «Hemos detectado anuncios en los que las telefónicas ofertan a las empresas un porcentaje de los 902»
Empresas que esconden sus «91»
Aunque hace un año que el Gobierno de Mariano Rajoy impuso por decreto ley la obligatoriedad de un servicio de atención telefónica gratuito para las empresas eléctricas, el propio usuario comprobará que algunas de las más importantes siguen sin facilitar un número sin coste, incluso si se solicita verbalmente a través del 902 que prescriben como número de atención al cliente. Sin embargo, esos números sí que existen, aunque hallarlos en la Red es tarea titánica.
«Todas las empresas de servicios básicos que utilizan teléfonos 902 deberían publicitar al mismo nivel visual el número local asociado», subraya un portavoz de Facua, que recuerda que «es ilegal ganar dinero a costa de las consultas de los usuarios».
«Orientados a vender y no a contestar»
Otro de los grandes problemas que las asociaciones de consumidores detectan en estos servicios de las grandes empresas es la deficiente cualificación de los empleados que están al otro lado del teléfono. Así, Facua pone el ejemplo de las compañías telefónicas, cuyos trabajadores están «orientados a vender y no contestar a lo que se les pregunta». Asimismo, para la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que precisamente el pasado 5 de abril pidió a la ministra Ana Mato que cumpliera su compromiso de promover una Ley de Atención al Consumidor en este tipo de servicios, los teléfonos de atención al cliente «suponen un obstáculo para las reclamaciones más que un medio para facilitarlas».
Fuente. abc.es